/ domingo 8 de julio de 2018

Cuitláhuac, hincarse en la segunda alternancia

Cuitláhuac García Jiménez ya es gobernador electo con un millón 667 mil votos, la cifra más alta en la historia para elegir a quien va a desempeñar ese cargo.

Esto es una diferencia de más de 200 mil votos de ventaja frente a su más cercano adversario, el candidato del PAN-PRD-MC, Miguel Ángel Yunes Márquez, quien alcanzó un millón 400 mil sufragios, y con él será la segunda alternancia en el Gobierno del Estado, que implica la enorme responsabilidad de hacer posible ese cambio que la sociedad ordenó con su voto. De ahí sus primeros ofrecimientos de acabar con la corrupción y encabezar un gobierno austero. No será fácil. El cáncer del robo al erario, o vinculado a la actividad pública, está profundamente enraizado en las esfera del Poder Ejecutivo, diríase que en mayor medida, pero sucede igual en los otros dos poderes, desde los más altos niveles hasta en los más modestos puestos, con honrosas excepciones. Es un primer aviso, y habrá que esperar un pronunciamiento más claro el domingo próximo, cuando dará su primer mensaje a los veracruzanos. ¿Quién es Cuitláhuac? Es un ciudadano xalapeño de vida normal, como cualquier otro, con estudios de ingeniería por la Universidad Veracruzana, maestro en Ciencias por la Universidad de Manchester, Inglaterra, estancia doctoral en la Universidad Técnica de Hamburgo (Tuhh), Alemania; especialidad en “Competencias Docentes” por la Universidad Pedagógica Nacional, y posgrado en el Instituto Politécnico Nacional. Es hijo de un reconocido luchador social de izquierda, el maestro Atanacio García Durán. Su única experiencia política es como diputado federal por Morena, sin que hasta ahora haya desempeñado algún cargo administrativo, ante lo que será de importancia vital rodearse de un equipo con amplios conocimientos en cada materia. Por ejemplo, en el ramo de seguridad, tema sensible en la sociedad y sobre el cual ha dicho que su gobierno lo atenderá de manera integral, se esperaría la designación de un experto en la materia que desde el inicio de su mandato establezca una estrategia eficaz contra la delincuencia, y en el resto deben esperarse decisiones acertadas de los funcionarios de su gabinete, sin cuotas ni amiguismos. El enorme bono que los ciudadanos le otorgaron con sus votos para ser gobernador será al mismo tiempo una gran exigencia, y no se dude que la sociedad estará muy atenta de su desempeño y del de sus colaboradores cercanos. Cuitláhuac tiene la gran oportunidad de hincarse en la historia de Veracruz.

GOBIERNO MUNICIPAL, PARALIZADO EN VERACRUZ. Ya pasó más de medio año de gobierno municipal en Veracruz y fuera de un buen carnaval, de nada más puede presumir. Hay parálisis y parecerían más ocupados en cómo organizar los festejos de los 500 años de la fundación del primer municipio en América que en trabajar en resolver los problemas de los porteños. La única obra que se observa desde hace varios meses es la del bulevar Manuel Ávila Camacho, su remodelación, que con un significativo avance, que está a cargo del Gobierno del Estado. Sin embargo, lo que se esperaba de la nueva administración local, por lo menos, es que mejoraran los servicios y se taparan los horrorosos baches que tiene Veracruz, miles, que dan una lamentable imagen de la ciudad y generan peligro para los automovilistas y transeúntes. Siguen ahí, más grandes que como estaban en los gobiernos anteriores. Esas trampas son de mayor riesgo cuando llueve, como ha ocurrido en los últimos días, porque el agua se encharca en las calles e impiden la visibilidad, lo que ocasiona que autos y personas caigan en ellos. Es una gran falla y no tardan en que se presenten protestas de los ciudadanos y organizaciones que resultan afectados por esta ineficiencia. Ojalá se tome conciencia de esta responsabilidad y se decida ordenar que se realicen esos urgentes y necesarios trabajos. Esperemos

opedro2006@gmail.com

Cuitláhuac García Jiménez ya es gobernador electo con un millón 667 mil votos, la cifra más alta en la historia para elegir a quien va a desempeñar ese cargo.

Esto es una diferencia de más de 200 mil votos de ventaja frente a su más cercano adversario, el candidato del PAN-PRD-MC, Miguel Ángel Yunes Márquez, quien alcanzó un millón 400 mil sufragios, y con él será la segunda alternancia en el Gobierno del Estado, que implica la enorme responsabilidad de hacer posible ese cambio que la sociedad ordenó con su voto. De ahí sus primeros ofrecimientos de acabar con la corrupción y encabezar un gobierno austero. No será fácil. El cáncer del robo al erario, o vinculado a la actividad pública, está profundamente enraizado en las esfera del Poder Ejecutivo, diríase que en mayor medida, pero sucede igual en los otros dos poderes, desde los más altos niveles hasta en los más modestos puestos, con honrosas excepciones. Es un primer aviso, y habrá que esperar un pronunciamiento más claro el domingo próximo, cuando dará su primer mensaje a los veracruzanos. ¿Quién es Cuitláhuac? Es un ciudadano xalapeño de vida normal, como cualquier otro, con estudios de ingeniería por la Universidad Veracruzana, maestro en Ciencias por la Universidad de Manchester, Inglaterra, estancia doctoral en la Universidad Técnica de Hamburgo (Tuhh), Alemania; especialidad en “Competencias Docentes” por la Universidad Pedagógica Nacional, y posgrado en el Instituto Politécnico Nacional. Es hijo de un reconocido luchador social de izquierda, el maestro Atanacio García Durán. Su única experiencia política es como diputado federal por Morena, sin que hasta ahora haya desempeñado algún cargo administrativo, ante lo que será de importancia vital rodearse de un equipo con amplios conocimientos en cada materia. Por ejemplo, en el ramo de seguridad, tema sensible en la sociedad y sobre el cual ha dicho que su gobierno lo atenderá de manera integral, se esperaría la designación de un experto en la materia que desde el inicio de su mandato establezca una estrategia eficaz contra la delincuencia, y en el resto deben esperarse decisiones acertadas de los funcionarios de su gabinete, sin cuotas ni amiguismos. El enorme bono que los ciudadanos le otorgaron con sus votos para ser gobernador será al mismo tiempo una gran exigencia, y no se dude que la sociedad estará muy atenta de su desempeño y del de sus colaboradores cercanos. Cuitláhuac tiene la gran oportunidad de hincarse en la historia de Veracruz.

GOBIERNO MUNICIPAL, PARALIZADO EN VERACRUZ. Ya pasó más de medio año de gobierno municipal en Veracruz y fuera de un buen carnaval, de nada más puede presumir. Hay parálisis y parecerían más ocupados en cómo organizar los festejos de los 500 años de la fundación del primer municipio en América que en trabajar en resolver los problemas de los porteños. La única obra que se observa desde hace varios meses es la del bulevar Manuel Ávila Camacho, su remodelación, que con un significativo avance, que está a cargo del Gobierno del Estado. Sin embargo, lo que se esperaba de la nueva administración local, por lo menos, es que mejoraran los servicios y se taparan los horrorosos baches que tiene Veracruz, miles, que dan una lamentable imagen de la ciudad y generan peligro para los automovilistas y transeúntes. Siguen ahí, más grandes que como estaban en los gobiernos anteriores. Esas trampas son de mayor riesgo cuando llueve, como ha ocurrido en los últimos días, porque el agua se encharca en las calles e impiden la visibilidad, lo que ocasiona que autos y personas caigan en ellos. Es una gran falla y no tardan en que se presenten protestas de los ciudadanos y organizaciones que resultan afectados por esta ineficiencia. Ojalá se tome conciencia de esta responsabilidad y se decida ordenar que se realicen esos urgentes y necesarios trabajos. Esperemos

opedro2006@gmail.com