El aumento en el precio de los combustibles desencadenó unaserie de encarecimiento de productos y servicios que comenzaron areflejarse con la disminución de ventas de alimentos en la Centralde Abasto, coincidieron comerciantes de ese lugar.
Los vendedores aseguraron que esta situación comenzó a partirdel inicio de este año a causa del “gasolinazo”, que enconsecuencia provocó incluso el aumento en el precio de la canastabásica.
Advirtieron que para febrero los precios podrían subir más,pues se espera otro “gasolinazo”, a pesar de la promesa delgobierno federal de no autorizar más este tipo de aumentos.
De acuerdo con Mario Vargas comúnmente recibía en su negocioalrededor de 150 clientes, mismos que a partir de este añocomenzaron a disminuir al menos en cinco por ciento a causa delaumento de precios de los abarrotes.
Sostuvo que la clientela compra los mismos productos, pero no enla misma cantidad que el año pasado, pues ahora tiene que ahorrarlo más posible para poder adquirir otros productos básicos.
Lo que más compran, dijo, son huevo, leche y otros alimentosque son indispensables para la alimentación en el hogar.
Por su parte, Irving Rojas manifestó que no sólo los alimentossubieron de precio, sino que además el precio de los fletes queimpiden realizar el acarreo para abastecer los locales.
Javier Muñoz agregó que el precio de los alimentos, a causadel “gasolinazo” limita el poder de adquisición de lasfamilias, por lo que ahora se ven obligadas a racionar sus ingresospara adquirir apuradamente “lo indispensable”.