Estamos en la antesala de triunfar en Veracruz y es necesario brincar todas las trancas que el régimen ha colocado para entorpecer la democratización en el estado. Desde hace tiempo el ansia monárquica ha dejado a su suerte a Ricky Riquín y sólo opera para lograr una gubernatura heredada. Para tratar de consumar su propósito se valen de recursos y del aparato del Estado y amenazan a los municipios para obligarlos a seguir su línea bajo la amenaza de hacerles la vida imposible tras su derrota y por los meses que le resten al frente al padre en el malgobierno del Estado.
Con todo y todo, los números no le están dando para imponer su ansia monárquica. AMLO arrasará en Veracruz y el resto de las candidaturas desde la gubernatura hasta las diputaciones locales caminan con paso firme y se miran amplias favoritas para ganar en el Estado y sortear con éxito todas las trampas, la guerra sucia, la compra y coacción del voto, la violencia política y el resto de marrullerias trazadas bajo el velo del voto cruzado para que el régimen se atrinchere en el resto de los cargos de elección popular.
Mantenemos ante el INE las quejas contra los monederos vacíos que los canayines están repartiendo en todo el estado pero sobre todo, sobre la versión Veracruzana de repartición de monederos (o tarjetas de descuento, según su versión oficial) confabuladas entre el que malgobierna el Estado y conocida tienda departamental en Veracruz. Exigimos al INE que se garantice el bloqueo de estas tarjetas y que no se permita por ningún motivo un mecanismo de pago para transferir por concepto de compra de voto.
El triunfo de AMLO ni Yunes lo cuestiona, dejó solo a Anaya y en condiciones democráticas, el triunfo de AMLO y de Cuitláhuac sería avasallador. Estamos luchando en Veracruz para que la democratización se logre en plenitud. El régimen tiene ya sus días contados, sus acarreos en todo el Estado no le han bastado para convencer. Sus boicots tampoco han surtido el efecto esperado. Las mentiras del que malgobierna en el caso Karime, tampoco. El ridículo de haber sido desmentido por la PGR o bien, el anuncio de que la casa recuperada no era de Duarte, lo tienen más visceral que de costumbre. Las cosas no le salen y sus mentiras no pegan. Sus encuestas, también gozan de una alta incredulidad.
El día de hoy casi todo Veracruz es Morena. Hoy la entrega de los veracruzanos hacia AMLO, Cuitláhuac, Morena y el resto de los candidatos significa el ansia de democracia, justicia, honestidad y equidad que todos juntos representan y que se logrará el próximo primero de julio con el voto masivo y parejo, además del cuidado de las casillas. La convicción de militantes y simpatizantes no se rinde, mucho menos se vende el primero de julio la transformación será por fin una realidad.
