Ixhuatlán del Sureste, Ver.– El silencio abunda en las instalaciones de la Cavidad Tuzandepetl en este municipio, en donde dos trabajadores murieron y tres resultaron heridos a causa del incendio ocurrido el pasado jueves.
Además, de acuerdo con obreros de Pemex, las labores de búsqueda de los tres reportados como desaparecidos se desarrollan con hermetismo y las identidades de los dos cuerpos hallados no han sido confirmada.
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La entrada a esas instalaciones, ubicadas entre los límites de Ixhuatlán del Sureste y Nanchital, son vigiladas únicamente por personal de la paraestal; los militares, policías de Seguridad Pública, municipales y de la Guardia Nacional, entre otras corporaciones que hasta ayer la custodiaban se retiraron hoy.
La ausencia de familiares de las víctimas, que ayer abarrotaron la entrada y las inmediaciones del Centro de Almacenamiento Estratégico de Pemex, facilita la entrada y la salida de unidades de la empresa que son utilizadas para las labores de limpieza.
La puerta que daba acceso de manera directa a la zona del desastre amaneció cerrada con tablas de madera, sin embargo, aún así es posible ver la magnitud de los daños; por todos lados se ven cenizas, estructuras metálicas y vehículos devastados; el olor a quemado también se percibe a lo lejos.
Evaluación oficial de daños
El director general de Pemex, Octavio Romero Oropeza, visitó ayer la zona siniestrada de la Cavidad Tuzandepetl para supervisar las labores de evaluación de daños y limpieza del lugar.
Durante el recorrido, estuvo acompañado de responsables del inmueble y de personal de las áreas de Logística, Seguridad, Exploración y Producción.
Mientras tanto, anoche, la secretaria de Energía Rocío Nahle estuvo en la refinería de Pemex en Minatitlán, que también sufrió un incendio, para conocer la situación de los cinco trabajadores accidentados y para supervisar el área en la planta afectada.
Por su parte, el último comunicado oficial de Pemex señala que el saldo del siniestro en la Cavidad Tuzandepetl es de dos muertos y tres desparecidos, además de que dos obreros siguen hospitalizados.
También lamenta la pérdida de las vidas humanas, las lesiones que sufrieron los trabajadores y reitera si compromiso con las familias de las víctimas.
Además, insiste en que las causas del siniestro en el equipo de perforación siguen bajo investigación.
Inicia reparación de red eléctrica
Desde temprano, cuadrillas de la Comisión Federal de Electricidad (CFE) llegaron a las inmediaciones de la Cavidad Tuzandepetl para llevar a cabo la rehabilitación y remplazo de postes y cables dañados por el incendio.
El siniestro dejó sin servicio de energía eléctrica a los poblados de Juan de la Barrera, Benito Canales, Rancho Paso Nuevo, Amatita, Villa del Espíritu Santo y parte de Paraíso.
Mientras personal de la CFE desarrolla los trabajos, vecinos de esas comunidades se mantienen a la expectativa y recuerdan que el día de los hechos sufrieron repentinamente un apagón, seguido de reportes de alerta para desalojar sus casas; no todos fueron llevados a refugios.
Al quedarse sin energía eléctrica, señalan, los alimentos que tenían en refrigeración se echaron a perder, además de que no pueden utilizar sus ventiladores ni climas para refrescarse de las altas temperaturas.
El servicio podría reanudarse entre hoy y mañana, de acuerdo con la CFE.
Ruta de evacuación, en mal estado
Durante un recorrido realizado en el tramo carretero que lleva de Ixhuatlán del Sureste a la autopista Coatzacoalcos-Villahermosa, Tabasco, se pudo observa que gran parte de su estructura se encuentra en mal estado.
La carretera figura como ruta de desalojo o evacuación de las comunidades antes citadas en caso de alguna contingencia grave ocasionada por las múltiples industrias que operan en la zona.
Sin embargo, sus aproximadamente 5 kilómetros están repletos de baches, hoyancos y de plano en algunas partes solo hay terracería.
Liliana Pardo, vecina, sostuvo que en caso de que el incendio de la Cavidad Tuzandepetl se hubiera salido de control el tramo carretero no habría sido eficaz para el desalojo de habitantes.
La otra ruta, agregó, es a través de la cabecera municipal de Ixhuatlán del Sureste, lo que dificultaría el traslado a causa de sus calles estrechas.
El tramo carretero es de competencia estatal y, de acuerdo con vecinos, tiene entre 8 y 10 años que han solicitado su rehabilitación.