/ jueves 18 de octubre de 2018

Alfabetizar a sordos

La semana pasada fui invitado a una reunión en la que tuve la oportunidad de escuchar, con mucha atención, a mi amigo el reconocido maestro Marco Antonio Rodríguez Revoredo.

Su interesante disertación versó, por una parte, en explicar que la gran mayoría de los niños y jóvenes con pérdida total de la capacidad auditiva son también analfabetas, situación por la cual el sistema de gobierno los excluye de uno de los derechos más preciados: la educación.

Expuso que si las autoridades, los directores y docentes de todos los niveles educativos no cuentan con herramientas didácticas adecuadas para alfabetizarlos, este grupo de la población permanecerá analfabeta el resto de su vida.

Exteriorizó que los sordos, por no tener acceso al mundo de la escritura y la lectura del español, desconocen la información escrita existente, no pueden estudiar los niveles medio superior y superior, tienen una mínima comunicación con los oyentes, por lo que como afirma el filósofo británico de origen austriaco Ludwig Wittgenstein, “los límites de su lenguaje significan los límites de su mundo”.

Por otra parte, nos comentó el maestro Rodríguez Revoredo que la Universidad Veracruzana, interesada en lograr la inclusión de los niños y jóvenes con discapacidad auditiva, creó el programa para alfabetizar a sordos llamado ALAS.

Este programa, entre otras características, aprovecha las ventajas que ofrece el uso las tecnologías de la informática y la comunicación aplicadas a la educación, está adaptado a las características del aprendizaje de los sordos, utiliza la lengua de señas mexicana, como apoyo didáctico y para su operación no se requiere de maestros especializados, intérpretes de lengua de señas o conocimientos avanzados de cómputo.

Estimado lector, si quiere usted colaborar o ayudar en el desarrollo del programa ALAS, para mejorar los servicios que ofrece lo puede hacer a través de tres formas: padrinazgo, otorgando una beca a un sordo de mil pesos anuales; haciendo donaciones de cierta cantidad de dinero para contribuir al desarrollo y consolidación del mismo o siendo patrocinador del programa para mejorar sustancialmente el servicio.

Si está interesado le sugiero visite su página web https://alas.uv.mx y participe en beneficio de esta comunidad aún excluida del sistema educativo mexicano.

Si apoya este programa muchos niños y jóvenes con sordera serán beneficiados al aprender a leer y escribir y serán capaces de manifestarse con plenitud, así como de comprender la cosmovisión de un mundo de culturas, de costumbres y de usos lingüísticos que los rodea.

El programa ALAS es un instrumento pedagógico veracruzano de inclusión social, sin precedentes en la educación de sordos.

carlos_jorge27@hotmail.com


La semana pasada fui invitado a una reunión en la que tuve la oportunidad de escuchar, con mucha atención, a mi amigo el reconocido maestro Marco Antonio Rodríguez Revoredo.

Su interesante disertación versó, por una parte, en explicar que la gran mayoría de los niños y jóvenes con pérdida total de la capacidad auditiva son también analfabetas, situación por la cual el sistema de gobierno los excluye de uno de los derechos más preciados: la educación.

Expuso que si las autoridades, los directores y docentes de todos los niveles educativos no cuentan con herramientas didácticas adecuadas para alfabetizarlos, este grupo de la población permanecerá analfabeta el resto de su vida.

Exteriorizó que los sordos, por no tener acceso al mundo de la escritura y la lectura del español, desconocen la información escrita existente, no pueden estudiar los niveles medio superior y superior, tienen una mínima comunicación con los oyentes, por lo que como afirma el filósofo británico de origen austriaco Ludwig Wittgenstein, “los límites de su lenguaje significan los límites de su mundo”.

Por otra parte, nos comentó el maestro Rodríguez Revoredo que la Universidad Veracruzana, interesada en lograr la inclusión de los niños y jóvenes con discapacidad auditiva, creó el programa para alfabetizar a sordos llamado ALAS.

Este programa, entre otras características, aprovecha las ventajas que ofrece el uso las tecnologías de la informática y la comunicación aplicadas a la educación, está adaptado a las características del aprendizaje de los sordos, utiliza la lengua de señas mexicana, como apoyo didáctico y para su operación no se requiere de maestros especializados, intérpretes de lengua de señas o conocimientos avanzados de cómputo.

Estimado lector, si quiere usted colaborar o ayudar en el desarrollo del programa ALAS, para mejorar los servicios que ofrece lo puede hacer a través de tres formas: padrinazgo, otorgando una beca a un sordo de mil pesos anuales; haciendo donaciones de cierta cantidad de dinero para contribuir al desarrollo y consolidación del mismo o siendo patrocinador del programa para mejorar sustancialmente el servicio.

Si está interesado le sugiero visite su página web https://alas.uv.mx y participe en beneficio de esta comunidad aún excluida del sistema educativo mexicano.

Si apoya este programa muchos niños y jóvenes con sordera serán beneficiados al aprender a leer y escribir y serán capaces de manifestarse con plenitud, así como de comprender la cosmovisión de un mundo de culturas, de costumbres y de usos lingüísticos que los rodea.

El programa ALAS es un instrumento pedagógico veracruzano de inclusión social, sin precedentes en la educación de sordos.

carlos_jorge27@hotmail.com