/ martes 1 de febrero de 2022

La esperanza de la transformación se desvanece

Con el paso de los años he tenido la oportunidad de conocer cada rincón del distrito que represento, estrechando lazos de amistad con muy buena parte de las generaciones de veracruzanos que fueron poblándolo.

Esta relación se fue robusteciendo conforme avanzamos acompañando sus requerimientos ante diversas dependencias, atrayendo recursos de inversión pública para construir innumerables terracerías, caminos vecinales, carreteras, escuelas, clínicas, sistemas de agua y saneamiento, perforación de pozos agrícolas, tendidos de electrificación y equipamiento urbano. No hay un solo municipio de la región que represento en el que no haya concretado acción de gobierno en cualquiera de los tres niveles de administración. Reconforta saber que hacer eco de las peticiones de los ciudadanos tuvo su impacto y beneficio en la calidad y condiciones de vida de la gente.

Lo lamentable es encontrar que con los años, muchas de esas acciones fueron perdiendo la eficacia que tuvieron de origen, bien por el nulo mantenimiento, las difíciles condiciones meteorológicas o por el incremento en la demanda de algún servicio específico, como el caso de la carretera que comunica a la localidad de 5 Palos, en la cabecera del distrito que represento.

Fue construida con recursos que hace más de una década etiquetó la Secretaría de Hacienda y Crédito Público en el PEF, debido a una gestión que impulsamos, obra que ejecutó la delegación estatal de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes.

Hoy sus habitantes, cada vez más numerosos en conjunto con los vecinos de localidades aledañas, padecen como tantos otros de diversas regiones de un camino en condiciones bastante deterioradas. Este fenómeno se ha reproducido, producto de una política fiscal muy adecuada en algunos renglones, pero deprimente para el día a día de millones de mexicanos.

Se castiga la inversión en proyectos de modernización, recuperación y mantenimiento, poblando de baches las calles en las zonas urbanas, debido a una exhaustiva política de austeridad que restringe el margen de maniobra de los gobiernos locales. No hay recursos disponibles para reconstruir una calle, pero se continúan destinando bolsas millonarias de recurso a tres grandes proyectos de inversión cuya repercusión económica para el país comienza a sembrar dudas entre los expertos en finanzas.

La sociedad puede no encontrar abasto pleno de medicamento en los hospitales públicos, equipamiento de calidad en las escuelas de todos los niveles, implementos y apoyo a la producción del sector campesino en conjunto, porque desde el decreto de distribución del gasto público correspondiente a este ejercicio 2022 no hay cupo para lo que a usted le importa, sino para lo que la Federación considere prioritario. En este tema quienes conformamos el bloque opositor en ambas Cámaras hemos sido enfáticos al defender los reclamos de mayor inversión hacia las regiones, encontrando un muro a través de la mayoría que representan los integrantes del bloque oficialista.

Ya estamos a poco más de la mitad del periodo del gobierno federal y, con mucho pesar, se debe reconocer que la esperanza de muchos en una verdadera transformación se desvanece conforme pasan los días, quedando sólo en el eslogan pegajoso que se repite sin cesar anunciando lo que ya es evidente no ha transformado casi nada.

(*) Diputado federal. PRI

Con el paso de los años he tenido la oportunidad de conocer cada rincón del distrito que represento, estrechando lazos de amistad con muy buena parte de las generaciones de veracruzanos que fueron poblándolo.

Esta relación se fue robusteciendo conforme avanzamos acompañando sus requerimientos ante diversas dependencias, atrayendo recursos de inversión pública para construir innumerables terracerías, caminos vecinales, carreteras, escuelas, clínicas, sistemas de agua y saneamiento, perforación de pozos agrícolas, tendidos de electrificación y equipamiento urbano. No hay un solo municipio de la región que represento en el que no haya concretado acción de gobierno en cualquiera de los tres niveles de administración. Reconforta saber que hacer eco de las peticiones de los ciudadanos tuvo su impacto y beneficio en la calidad y condiciones de vida de la gente.

Lo lamentable es encontrar que con los años, muchas de esas acciones fueron perdiendo la eficacia que tuvieron de origen, bien por el nulo mantenimiento, las difíciles condiciones meteorológicas o por el incremento en la demanda de algún servicio específico, como el caso de la carretera que comunica a la localidad de 5 Palos, en la cabecera del distrito que represento.

Fue construida con recursos que hace más de una década etiquetó la Secretaría de Hacienda y Crédito Público en el PEF, debido a una gestión que impulsamos, obra que ejecutó la delegación estatal de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes.

Hoy sus habitantes, cada vez más numerosos en conjunto con los vecinos de localidades aledañas, padecen como tantos otros de diversas regiones de un camino en condiciones bastante deterioradas. Este fenómeno se ha reproducido, producto de una política fiscal muy adecuada en algunos renglones, pero deprimente para el día a día de millones de mexicanos.

Se castiga la inversión en proyectos de modernización, recuperación y mantenimiento, poblando de baches las calles en las zonas urbanas, debido a una exhaustiva política de austeridad que restringe el margen de maniobra de los gobiernos locales. No hay recursos disponibles para reconstruir una calle, pero se continúan destinando bolsas millonarias de recurso a tres grandes proyectos de inversión cuya repercusión económica para el país comienza a sembrar dudas entre los expertos en finanzas.

La sociedad puede no encontrar abasto pleno de medicamento en los hospitales públicos, equipamiento de calidad en las escuelas de todos los niveles, implementos y apoyo a la producción del sector campesino en conjunto, porque desde el decreto de distribución del gasto público correspondiente a este ejercicio 2022 no hay cupo para lo que a usted le importa, sino para lo que la Federación considere prioritario. En este tema quienes conformamos el bloque opositor en ambas Cámaras hemos sido enfáticos al defender los reclamos de mayor inversión hacia las regiones, encontrando un muro a través de la mayoría que representan los integrantes del bloque oficialista.

Ya estamos a poco más de la mitad del periodo del gobierno federal y, con mucho pesar, se debe reconocer que la esperanza de muchos en una verdadera transformación se desvanece conforme pasan los días, quedando sólo en el eslogan pegajoso que se repite sin cesar anunciando lo que ya es evidente no ha transformado casi nada.

(*) Diputado federal. PRI