Mañana, a las 17 horas, será inaugurada en el espacio expositivo Ernesto “Pelón” Bautista de la Casa del Lago la muestra colectiva del taller Manufactura de sueños, denominada Imagen y memoria.
La exposición reúne más de 30 obras realizadas por 22 artistas que han pasado por el taller que dirigen Leticia Tarragó y Paulina Vilchis.
Acerca de esta labor, Paulina Vilchis comenta: “En el año 2013 surgió la posibilidad de organizar nuestro primer Curso de Grabado en el Taller de Briones (más tarde nombrado Taller Manufactura de Sueños). Surgió simplemente como un proyecto de verano, pero ese mismo año decidimos que sería una buena idea establecer los cursos como una actividad permanente. La técnica que impartimos es la de grabado en acrílico, que mi madre adoptó ya hace varios años como opción alternativa al grabado en metal. Con esta técnica, al no utilizar ácidos para marcar la placa, los costos de material se reducen así como los niveles tóxicos.
La nobleza de esta técnica nos ha permitido experimentar y jugar con ella en el taller, además de tener la cualidad de darle al alumno la oportunidad de seguir trabajando la placa hasta obtener los resultados que ellos buscan”.
Con respecto a sus cursos, abunda que siempre han procurado incluir alumnos de todos los niveles: tanto participantes sin ninguna preparación artística como artistas plásticos; el taller es para todos. Así, en un ambiente de cordialidad, impulsan la expresión a través del arte.
“Otro factor importantísimo que nos motiva a dar año con año estos cursos es la experiencia de conocer gente con la cual se han forjado relaciones de amistad que hasta el día de hoy perduran. Es importante mencionar que también nos hemos desplazado a impartir el curso a otras entidades como Guadalajara, Orizaba, Cd. Obregón y el puerto de Veracruz. En esta exposición hay participantes de todos esos sitios.
Así pues, esta Imagen y memoria es la primera exposición en que Manufactura de sueños reúne a sus alumnos.
Y como lo recalca, por su parte, Daniel Domínguez en la cédula de sala que acompaña la exposición: “Quizás uno de los aspectos que más vale la pena resaltar es la atmósfera de libertad y bienestar que se logra al interior del taller, pues trabajar el grabado es una experiencia de vida, de saber convivir y de aprender a respetar las ideas, los deseos, las fantasías y las realizaciones de otros.”
Las obras estarán a la vista del público hasta el 7 de julio. El acceso al espacio expositivo de la Casa del Lago no tiene costo.
