Fiestas patronales de la entidad en las que existan vaquilladas, capeas o actividades que involucren a toros podrían estar reguladas con el operativo Alcoholímetro con el fin de garantizar que ninguna persona alcoholizada pueda entrar en contacto con los animales y ponerse en riesgo o a ellos.
En entrevista, Pedro Múzquiz Peña, secretario Técnico del Consejo Estatal para la Prevención de Accidentes a cargo de la Secretaría de Salud de Veracruz, dio a conocer que ya se trabaja en una propuesta para regular estas actividades tal como se hizo en la capea del pasado domingo en Xico. Incluso destacó que lo ideal es que aquellas personas que quieran ingresar a la zona de los toros se inscriban con un día de anticipación con el fin de evitar que la adrenalina o el alcohol sea lo que los impulse a participar.
“Lo que se busca es hacer marcos regulatorios y que quede ya regulado el evento de la capea. No queremos tener a esos espontáneos que en el mero momento decidan ingresar ya que tenemos que hacer esto muy formal; también conviene regular la edad para que no ingresen jóvenes menores de edad ni personas mayores de 60 porque ya sus capacidades funcionales no son las óptimas”, dijo.
Dio a conocer que la Secretaría de Salud está en la disposición de prestar los equipos de alcoholimetría a las autoridades federales y de tránsito para que se lleven a cabo los análisis no sólo de las personas que quieran ingresar sino también de los automovilistas que acudan a eventos en los que el consumo de alcohol es muy elevado.
En ese sentido, Múzquiz Peña destacó que las únicas cuatro personas que resultaron lesionadas en la capea del 22 de julio fueron las que se saltaron el filtro de seguridad y que en todos los casos hubo alcohol de por medio. En ese sentido destacó que se buscará que se apliquen las sanciones correspondientes a quienes permitieron el ingreso de estas personas.
Finalmente, el funcionario estatal recordó que el pasado domingo se aplicaron en Xico 321 pruebas de alcohol a los participantes de la capea de los cuales, 49 resultaron positivos y se les prohibió el ingreso. Por cuanto hace a los vehículos, se filtraron a 908 conductores, se valoraron a 79 y de esos, 19 resultaron no aptos para conducir —lo que equivale al 2.09%— por lo que se les pidió que dejaran el automóvil en manos de otra persona responsable o que esperaran a que bajara el alcohol para continuar con la marcha.