/ viernes 27 de agosto de 2021

Salud y educación

No hay día y más ahora que no se habla del regreso a clases. A pesar de las declaraciones oficiales en entrevistas, de los boletines de prensa que envía la SEP, aunados a las instrucciones dadas a los directivos de cada escuela y en consecuencia a los docentes, sobre este tema no hay nada claro para los gobiernos estatales.

En una reunión los días 13 y 14 de agosto con la SEP y el representante de Salud " los secretarios de Educación de los estados escucharon a las autoridades federales cantinflear sobre una cuestión muy específica: bajo qué consideraciones legales podemos regresar a clases". No hubo respuesta, dice Salvador Camarena del Financiero.

Indudablemente hay que retornar a clases. El problema es cómo hacerlo con el menor riesgo de contagios para estudiantes, sus familias, los docentes y otras personas. Y aquí aparece el asunto de la corresponsabilidad. El gobierno federal decretó el cierre de actividades en varios acuerdos del Diario Oficial de la Federación. El más citado de ellos es el del 14 de mayo de 2020 sobre la “reapertura de las actividades sociales, educativas y económicas, así como un sistema de semáforo por regiones para evaluar semanalmente el riesgo epidemiológico relacionado con la reapertura de actividades en cada entidad federativa..." Este acuerdo entonces considera que sólo cuando el semáforo sanitario aparece en verde pueden abrir las escuelas.

Ante los cuestionamientos de los secretarios de educación estatales, que requerían certeza jurídica y pasos lógicos, López-Gatell de Salud dijo "que sacarían el acuerdo la semana entrante, pero tienen semanas diciendo eso. Se está perdiendo tiempo y entrando en un desgaste innecesario”, comenta Salvador Camarena.

Hoy solo existe una disposición oficial que establece la reapertura de las escuelas y menos se ha considerado que un número considerable de entidades no tienen instalaciones educativas óptimas para ello.

Ahora la responsabilidad será de los gobiernos locales. Hasta el miércoles 25 agosto, 18 estados habían confirmado su regreso a clases presenciales, entidades con semáforo verde o amarillo; 9 analizan la vuelta a las aulas y 3 definitivamente no se incorporan. El retorno a clases debe ser apoyado por los tres niveles de gobierno, los cuales están obligados a establecer estrategias conjuntas para que se pueda hablar de un retorno seguro y no únicamente hacer responsables a directores , maestros y padres de familia.

En el Universal se dice que en Sonora el regreso a clases se realizará de manera gradual, dosificada, ordenada, escalonada, segmentada y presencial o mixta (conforme a los espacios disponibles en cada aula) o conforme a la modalidad que las autoridades determinen. También se evaluarán las condiciones de la infraestructura educativa a efecto de conocer la disponibilidad de las instalaciones que procuren una operatividad en el programa. Los alumnos y padres de familia podrán optar libremente por acudir o no a clases presenciales, de modo que esa decisión sólo corresponderá, en caso de los menores de edad, a sus padres, madres, tutores o a quienes ejerzan la patria potestad.

Andrés Mendoza comenta : de acuerdo con datos de la Secretaría de Salud federal (Ssa) desglosados por Serendipia, una iniciativa de periodismo de datos, al 18 de agosto, 146 mil 293 niños y adolescentes de 0 a 17 años fueron reportados como casos positivos. En esta cifra incluye los casos positivos confirmados por prueba, asociación clínica y comité de dictaminación, por lo que el total es mayor al reportado por la Secretaría Ejecutiva del Sistema Nacional de Protección Integral de Niñas, Niños y Adolescentes (Sipinna), actualizados al 15 de agosto, indican que de mil 613 casos registrados en junio entre menores de 0 a 17 años, para julio aumentaron a 5 mil 373, un alza de 233 por ciento.

Mendoza en Excélsior también señala "La mayoría de los contagios han sido entre adolescentes de 12 a 17 años, con 87 mil 378 casos. Además, 36 mil 534 niños de 6 a 11 años y 22 mil 381 menores de 6 años han resultado positivos al virus SARS-CoV-2. Lo anterior significa que el número de casos positivos en menores de 18 años se incrementó a niveles sin precedentes a finales de julio de este año". La cuestión lleva a evitar la cuarta o quinta ola de contagio tomando como antecedente las anteriores que la Secretaría de Salud federal no ha podido evitar a tiempo.

Salud y educación son dos factores que han estado presentes durante esta pandemia. "En circunstancias normales, las políticas de salud pública y de educación pública son independientes. Hay una secretaría de salud y hay una de educación y la interacción entre ambas no determina el funcionamiento de ninguna de ellas. Con la irrupción de la pandemia de Covid esta situación cambió de manera dramática, en México y en el mundo entero. Ahora, las disposiciones de los ministerios de salud han incidido sobre las actividades de los ministerios de educación.

Este 30 de agosto continuará el debate que se ha planteado en días recientes en torno a la decisión de volver o no a la escuela presencial. En tanto la Secretaría de Educación Pública ahora decidió por encima de la secretaría de salud argumentando “Es difícil pensar en el regreso a la escuela cuando todavía no se ha controlado la pandemia en todo el mundo. Sin embargo, algunas regiones del país han logrado remontar la etapa crítica, de modo que continuar sin actividades escolares presenciales o semipresenciales implica riesgos muy graves para el desarrollo de niños, niñas y adolescentes del país, objetivo central de la educación que imparte el Estado”. Hugo López-Gatell, subsecretario de Salud hace unos días señaló que “mientras exista la epidemia en el mundo, todos los países tienen posibilidades de tener cuartas, quintas y sextas olas… En todo momento puede ocurrir y por eso hay que estar muy al pendiente de lo que va ocurriendo en cada país, en todo momento”.

No hay día y más ahora que no se habla del regreso a clases. A pesar de las declaraciones oficiales en entrevistas, de los boletines de prensa que envía la SEP, aunados a las instrucciones dadas a los directivos de cada escuela y en consecuencia a los docentes, sobre este tema no hay nada claro para los gobiernos estatales.

En una reunión los días 13 y 14 de agosto con la SEP y el representante de Salud " los secretarios de Educación de los estados escucharon a las autoridades federales cantinflear sobre una cuestión muy específica: bajo qué consideraciones legales podemos regresar a clases". No hubo respuesta, dice Salvador Camarena del Financiero.

Indudablemente hay que retornar a clases. El problema es cómo hacerlo con el menor riesgo de contagios para estudiantes, sus familias, los docentes y otras personas. Y aquí aparece el asunto de la corresponsabilidad. El gobierno federal decretó el cierre de actividades en varios acuerdos del Diario Oficial de la Federación. El más citado de ellos es el del 14 de mayo de 2020 sobre la “reapertura de las actividades sociales, educativas y económicas, así como un sistema de semáforo por regiones para evaluar semanalmente el riesgo epidemiológico relacionado con la reapertura de actividades en cada entidad federativa..." Este acuerdo entonces considera que sólo cuando el semáforo sanitario aparece en verde pueden abrir las escuelas.

Ante los cuestionamientos de los secretarios de educación estatales, que requerían certeza jurídica y pasos lógicos, López-Gatell de Salud dijo "que sacarían el acuerdo la semana entrante, pero tienen semanas diciendo eso. Se está perdiendo tiempo y entrando en un desgaste innecesario”, comenta Salvador Camarena.

Hoy solo existe una disposición oficial que establece la reapertura de las escuelas y menos se ha considerado que un número considerable de entidades no tienen instalaciones educativas óptimas para ello.

Ahora la responsabilidad será de los gobiernos locales. Hasta el miércoles 25 agosto, 18 estados habían confirmado su regreso a clases presenciales, entidades con semáforo verde o amarillo; 9 analizan la vuelta a las aulas y 3 definitivamente no se incorporan. El retorno a clases debe ser apoyado por los tres niveles de gobierno, los cuales están obligados a establecer estrategias conjuntas para que se pueda hablar de un retorno seguro y no únicamente hacer responsables a directores , maestros y padres de familia.

En el Universal se dice que en Sonora el regreso a clases se realizará de manera gradual, dosificada, ordenada, escalonada, segmentada y presencial o mixta (conforme a los espacios disponibles en cada aula) o conforme a la modalidad que las autoridades determinen. También se evaluarán las condiciones de la infraestructura educativa a efecto de conocer la disponibilidad de las instalaciones que procuren una operatividad en el programa. Los alumnos y padres de familia podrán optar libremente por acudir o no a clases presenciales, de modo que esa decisión sólo corresponderá, en caso de los menores de edad, a sus padres, madres, tutores o a quienes ejerzan la patria potestad.

Andrés Mendoza comenta : de acuerdo con datos de la Secretaría de Salud federal (Ssa) desglosados por Serendipia, una iniciativa de periodismo de datos, al 18 de agosto, 146 mil 293 niños y adolescentes de 0 a 17 años fueron reportados como casos positivos. En esta cifra incluye los casos positivos confirmados por prueba, asociación clínica y comité de dictaminación, por lo que el total es mayor al reportado por la Secretaría Ejecutiva del Sistema Nacional de Protección Integral de Niñas, Niños y Adolescentes (Sipinna), actualizados al 15 de agosto, indican que de mil 613 casos registrados en junio entre menores de 0 a 17 años, para julio aumentaron a 5 mil 373, un alza de 233 por ciento.

Mendoza en Excélsior también señala "La mayoría de los contagios han sido entre adolescentes de 12 a 17 años, con 87 mil 378 casos. Además, 36 mil 534 niños de 6 a 11 años y 22 mil 381 menores de 6 años han resultado positivos al virus SARS-CoV-2. Lo anterior significa que el número de casos positivos en menores de 18 años se incrementó a niveles sin precedentes a finales de julio de este año". La cuestión lleva a evitar la cuarta o quinta ola de contagio tomando como antecedente las anteriores que la Secretaría de Salud federal no ha podido evitar a tiempo.

Salud y educación son dos factores que han estado presentes durante esta pandemia. "En circunstancias normales, las políticas de salud pública y de educación pública son independientes. Hay una secretaría de salud y hay una de educación y la interacción entre ambas no determina el funcionamiento de ninguna de ellas. Con la irrupción de la pandemia de Covid esta situación cambió de manera dramática, en México y en el mundo entero. Ahora, las disposiciones de los ministerios de salud han incidido sobre las actividades de los ministerios de educación.

Este 30 de agosto continuará el debate que se ha planteado en días recientes en torno a la decisión de volver o no a la escuela presencial. En tanto la Secretaría de Educación Pública ahora decidió por encima de la secretaría de salud argumentando “Es difícil pensar en el regreso a la escuela cuando todavía no se ha controlado la pandemia en todo el mundo. Sin embargo, algunas regiones del país han logrado remontar la etapa crítica, de modo que continuar sin actividades escolares presenciales o semipresenciales implica riesgos muy graves para el desarrollo de niños, niñas y adolescentes del país, objetivo central de la educación que imparte el Estado”. Hugo López-Gatell, subsecretario de Salud hace unos días señaló que “mientras exista la epidemia en el mundo, todos los países tienen posibilidades de tener cuartas, quintas y sextas olas… En todo momento puede ocurrir y por eso hay que estar muy al pendiente de lo que va ocurriendo en cada país, en todo momento”.