/ lunes 20 de enero de 2020

¿Bolsas de plástico?

Es una obligación, un deber de todo comerciante el proporcionar un embalaje ya sea de cartón o plástico al cliente que tiene a bien comprar un producto.

Recientemente idearon el prohibir bolsas de plástico para poder llevar productos al menudeo comprados en tiendas de abarrotes. Si quienes lo hicieron tienen la falsa creencia de que así están salvando la ecología y el equilibrio del planeta, pues están sumamente equivocados. Hagamos la cuenta, plástico y hule hay por doquier, llantas viejas, gaseosas en pet casi todas, yogur en botes de plástico; pero si la medida es tan sólo por multar a quien las otorgue, también deben saber que las verdaderas formas y causas de la contaminación no radican en meras y simples bolsas asesinas.

Es una ignorantada seguir esta política de omisión, el único que ahorra es el comerciante al quitarse tal deber. Los sinarquistas del PVEM quieren justificar su chamba, deberían comenzar por la protección de los mantos freáticos, la necesaria agua potable, así como el verdadero reciclamiento de pilas que acaban contaminando millones de litros de H2O.

Reconvertir la medida a bolsas biodegradables es sólo un mero paso; amoníaco y metano son gases que expiden las vacas sobre-explotadas, contribuyen un 5% al cambio de clima, la deforestación del Cofre de Perote hizo de unas cuantas familias empresarios millonetas, ahí no dicen nada en lo absoluto, y bien saben ellos cuáles son los causantes del ecocidio.

La quema "brutal de carbón" se acentúa en China y últimamente con la administración Trump, se echó para atrás la ley de Obama en cuanto a restringir el uso carbonífero para la generación de electricidad fácil, rápida y barata en apariencia. Como verán hay otros tópicos mucho más importantes, que meramente colgarse medallitas de salvadores de la ecología sin ni siquiera dar mayores opciones a otras variables más polutivas.

Los verdaderos ambientalistas estarían ocupados en posibilitar la implementación de “biodigestores” municipales, cuando menos para su uso en forma de abono orgánico. Consulten las ventajas de los biodigestores para que la congruencia llegue a sus mentes mis afamados legisladores e innovadores salvadores del oxígeno que respiramos. Dejo esta tarea al famoso “niño verde” y ojalá la pueda explicar alguno de sus integrantes en el Congreso federal.

El dengue aquí en Xalapa es resultado de la deforestación en aras de pavimentar y construir viviendas, pero también el negocio es negocio.

Es una obligación, un deber de todo comerciante el proporcionar un embalaje ya sea de cartón o plástico al cliente que tiene a bien comprar un producto.

Recientemente idearon el prohibir bolsas de plástico para poder llevar productos al menudeo comprados en tiendas de abarrotes. Si quienes lo hicieron tienen la falsa creencia de que así están salvando la ecología y el equilibrio del planeta, pues están sumamente equivocados. Hagamos la cuenta, plástico y hule hay por doquier, llantas viejas, gaseosas en pet casi todas, yogur en botes de plástico; pero si la medida es tan sólo por multar a quien las otorgue, también deben saber que las verdaderas formas y causas de la contaminación no radican en meras y simples bolsas asesinas.

Es una ignorantada seguir esta política de omisión, el único que ahorra es el comerciante al quitarse tal deber. Los sinarquistas del PVEM quieren justificar su chamba, deberían comenzar por la protección de los mantos freáticos, la necesaria agua potable, así como el verdadero reciclamiento de pilas que acaban contaminando millones de litros de H2O.

Reconvertir la medida a bolsas biodegradables es sólo un mero paso; amoníaco y metano son gases que expiden las vacas sobre-explotadas, contribuyen un 5% al cambio de clima, la deforestación del Cofre de Perote hizo de unas cuantas familias empresarios millonetas, ahí no dicen nada en lo absoluto, y bien saben ellos cuáles son los causantes del ecocidio.

La quema "brutal de carbón" se acentúa en China y últimamente con la administración Trump, se echó para atrás la ley de Obama en cuanto a restringir el uso carbonífero para la generación de electricidad fácil, rápida y barata en apariencia. Como verán hay otros tópicos mucho más importantes, que meramente colgarse medallitas de salvadores de la ecología sin ni siquiera dar mayores opciones a otras variables más polutivas.

Los verdaderos ambientalistas estarían ocupados en posibilitar la implementación de “biodigestores” municipales, cuando menos para su uso en forma de abono orgánico. Consulten las ventajas de los biodigestores para que la congruencia llegue a sus mentes mis afamados legisladores e innovadores salvadores del oxígeno que respiramos. Dejo esta tarea al famoso “niño verde” y ojalá la pueda explicar alguno de sus integrantes en el Congreso federal.

El dengue aquí en Xalapa es resultado de la deforestación en aras de pavimentar y construir viviendas, pero también el negocio es negocio.