/ lunes 6 de agosto de 2018

Bomberos de Xalapa, héroes semi olvidados

El fuego, recurso natural para la calidad de vida de la humanidad, también es un eminente peligro cuando se le trata con descuido y displicencia, desgraciadamente esto no es casual. Por hallazgos en las cuevas de Wonderwek, Sudáfrica, hay evidencias de que el fuego es usado por el humano desde hace un millón de años.

Catástrofes causadas por el fuego han impulsado a la humanidad a defenderse, antes de aprender a prevenirlo. Con el paso del tiempo combatir el fuego, verdugo de vidas y patrimonios, se convirtió en una ciencia generando inventos de progresiva complejidad técnica, para lanzar agua el enemigo natural de las llamas en cantidades eficaces, para neutralizar los siniestros.

La voluntad, el valor y espíritu de sacrificio del bombero para enfrentarse con valentía y arrojo para enfrentarse al fuego, su enemigo implacable, son factores paralelos y que han permitido salvar un sinnúmero de vidas en conflagraciones del mundo entero.

Pero hay escasa disposición de los seres humanos a ser “apagafuegos” por la peligrosidad que ello representa, es manifiesto el desinterés de la ciudadanía por ser bombero porque el miedo al fuego es tribal. En diversos estados mexicanos, incluyendo Veracruz, es notable el poco interés de las autoridades de todo nivel para apoyar a este grupo aguerrido por vocación.

Los primeros bomberos registrados en la historia datan del esplendor de Roma y Grecia varios siglos antes de Cristo. Actualmente en el mundo hay cuerpos de bomberos autoproclamados “los mejores del mundo”, sentimiento respetable, pero los bomberos de la Ciudad de México han sido reconocidos mundialmente por su organización, equipo y heroísmo, dignos de emular y apoyar sin condiciones.

En Xalapa hay un reducido grupo de bomberos, bien entrenado, motivado por el entusiasmo de servir al próximo, y siempre están cuando se requieren, aunque usted no lo sepa y quizá menos lo sienta pero ahí están, para salir en clásicos camiones rojos ululando por nuestra ciudad para salvar vidas, apagando fuego, rescate en inundaciones, cerrar fugas de letal gas y… gentilmente salvar un gatito que a la señora se le fugó hacia un alto árbol y no puede bajar.

Nuestros bomberos avezados, sin miedo al peligro y complacientes, cuando la ocasión le necesita, tienen recursos elementales y poca gente y menos funcionarios se preocupan gran cosa por ellos, sólo hasta que los requieren con urgencia.

Los bomberos de Xalapa cumplirán 80 años el 3 de octubre próximo, recordamos con respeto a sus fundadores Ernesto Ortiz Medina y Alfonso Flores Bello.

Un hombre que ha dedicado vigor de juventud, sapiencia de madurez y reflexiones de vejez a los venerables “Bomberos de Xalapa” es don Ernesto Flores Tlapa, el Comandante, quien requiere espacio aparte.

Nuestros heroicos “tragahumo” y don Ernesto son seres humanos imponderables, quienes sin más interés que servir han dedicado sus vidas a ser esforzados bomberos, que nada tienen que ver con la política y sus avatares, esto debe tenerse claro. La ciudadanía debe apoyarlos.

hsilva_mendoza@hotmail.com


El fuego, recurso natural para la calidad de vida de la humanidad, también es un eminente peligro cuando se le trata con descuido y displicencia, desgraciadamente esto no es casual. Por hallazgos en las cuevas de Wonderwek, Sudáfrica, hay evidencias de que el fuego es usado por el humano desde hace un millón de años.

Catástrofes causadas por el fuego han impulsado a la humanidad a defenderse, antes de aprender a prevenirlo. Con el paso del tiempo combatir el fuego, verdugo de vidas y patrimonios, se convirtió en una ciencia generando inventos de progresiva complejidad técnica, para lanzar agua el enemigo natural de las llamas en cantidades eficaces, para neutralizar los siniestros.

La voluntad, el valor y espíritu de sacrificio del bombero para enfrentarse con valentía y arrojo para enfrentarse al fuego, su enemigo implacable, son factores paralelos y que han permitido salvar un sinnúmero de vidas en conflagraciones del mundo entero.

Pero hay escasa disposición de los seres humanos a ser “apagafuegos” por la peligrosidad que ello representa, es manifiesto el desinterés de la ciudadanía por ser bombero porque el miedo al fuego es tribal. En diversos estados mexicanos, incluyendo Veracruz, es notable el poco interés de las autoridades de todo nivel para apoyar a este grupo aguerrido por vocación.

Los primeros bomberos registrados en la historia datan del esplendor de Roma y Grecia varios siglos antes de Cristo. Actualmente en el mundo hay cuerpos de bomberos autoproclamados “los mejores del mundo”, sentimiento respetable, pero los bomberos de la Ciudad de México han sido reconocidos mundialmente por su organización, equipo y heroísmo, dignos de emular y apoyar sin condiciones.

En Xalapa hay un reducido grupo de bomberos, bien entrenado, motivado por el entusiasmo de servir al próximo, y siempre están cuando se requieren, aunque usted no lo sepa y quizá menos lo sienta pero ahí están, para salir en clásicos camiones rojos ululando por nuestra ciudad para salvar vidas, apagando fuego, rescate en inundaciones, cerrar fugas de letal gas y… gentilmente salvar un gatito que a la señora se le fugó hacia un alto árbol y no puede bajar.

Nuestros bomberos avezados, sin miedo al peligro y complacientes, cuando la ocasión le necesita, tienen recursos elementales y poca gente y menos funcionarios se preocupan gran cosa por ellos, sólo hasta que los requieren con urgencia.

Los bomberos de Xalapa cumplirán 80 años el 3 de octubre próximo, recordamos con respeto a sus fundadores Ernesto Ortiz Medina y Alfonso Flores Bello.

Un hombre que ha dedicado vigor de juventud, sapiencia de madurez y reflexiones de vejez a los venerables “Bomberos de Xalapa” es don Ernesto Flores Tlapa, el Comandante, quien requiere espacio aparte.

Nuestros heroicos “tragahumo” y don Ernesto son seres humanos imponderables, quienes sin más interés que servir han dedicado sus vidas a ser esforzados bomberos, que nada tienen que ver con la política y sus avatares, esto debe tenerse claro. La ciudadanía debe apoyarlos.

hsilva_mendoza@hotmail.com