Este pasado 3 de abril, tuve la oportunidad de acudir a la toma de protesta de la nueva presidenta del INE, Guadalupe Taddei Zavala, así como de la consejera Rita Bell López y los consejeros Jorge Montaño y Arturo Castillo, quiénes fueron electos por la Cámara de Diputados a través del proceso de insaculación que establece la Constitución de los Estados Unidos Mexicanos, cuando no se logra un acuerdo de la Junta de Coordinación Política de dicha Cámara,
Como diputada federal fui participe de este proceso de selección inédito en la historia de México el cual, por cierto, se desarrolló de una manera ordenada y respetuosa con la presencia de 484 diputadas y diputados en el salón de plenos de dicho poder legislativo. Cabe destacar que durante la XLV Legislatura, ninguna sesión se había llevado a cabo con tanta sobriedad y respeto entre legisladores y legisladoras. Todas y todos estábamos conscientes que en nuestras manos estaba la legalidad y legitimidad de una selección, que, apegada a derecho, permitiera por fin, iniciar una nueva etapa en la Institución arbitro de los procesos electorales.
Las reglas de insaculación y de comportamiento fueron claramente definidas por la Junta de Coordinación Política, y todas y todos las respetamos al pie de la letra. Fue una selección abierta al pueblo, grabada a través del Canal del Congreso para que toda la ciudadanía la pudiera observar, y la pueda ver y volver a ver una y otra vez para disipar cualquier duda, incertidumbre o sospecha mal fundada.
Hoy queda claro que nadie quiere o ha querido destruir al INE, ha quedado claro también que la mayoría de las fuerzas políticas de este país somos capaces de salir adelante, aún en los momentos en los que pareciera difícil o imposible el logro de acuerdos, ha quedado claro, pues, que actuamos con responsabilidad para fortalecer la democracia y lograr hacer una realidad el artículo 39 de nuestra Carta Magna, que reconoce que la soberanía nacional reside esencial y originariamente en el pueblo y que por tanto su concreción depende de la posibilidad de mejorar nuestros procesos electorales con el apoyo de un arbitro honesto e imparcial, alejado de todo interés personal, partidista o de grupo cualquiera que éste sea.
Y enfatizo, que la mayoría de las fuerzas políticas, porque el Partido Acción Nacional no deja de dar palos de ciego en medio del abandono en el que se encuentra por parte de la mayoría de la población. Un día habla de que el INE no se toca, otro día aprueba las reglas de la insaculación, participa ordenadamente en la sesión, firma el acta de la sesión conducida por Santiago Creel y al otro día amanece en “modo impugnación”, desconociendo el proceso y a dos de los consejeros del INE a los que si pretenden “tocar”. Sin duda, en la vida y en la política cada quien decide como quiere pasar a la historia, y al parecer, en este proceso de tan alta importancia para la vida democrática de México, ese Partido ha decidido seguirse alejando del pueblo con su actuar errático e hipócrita.
Lo realmente importante este 3 de abril, ha sido la esperanza de iniciar la reconstrucción de una institución electoral que deje atrás los fraudes electorales del pasado ya sea a través de la manipulación de los sistemas de cómputo como sucedió en el 2006, o a través de la no actuación ante la evidente compra de votos como lo fue el proceso del 2012. Un INE en el que la imparcialidad y la honestidad sean costumbre, y en el que la burla y discriminación hacia la población indígena no tengan cabida. Un INE en el que la austeridad y la eliminación de privilegios de consejeros y personas servidoras públicas sean una realidad. Un INE que crea en la importancia de la democracia participativa y coadyuve a su implementación progresiva en nuestro país, y desde luego un INE que haga valer en todos los procesos electorales y en toda su conformación interna la paridad de género,
Hoy empezamos muy bien, la mayoría de las personas integrantes del Consejo General son mujeres, incluyendo a su presidenta, hago votos para que en su actuar tenga siempre presente la imperante necesidad de transformar ese Instituto por el bien del sistema democrático de nuestro país y honre en todo momento la invaluable oportunidad de ser la primera mujer presidenta del INE. Hoy sin duda, es tiempo de empezar a REPENSAR EL INE.
*Diputada federal por Morena
Este pasado 3 de abril, tuve la oportunidad de acudir a la toma de protesta de la nueva presidenta del INE, Guadalupe Taddei Zavala, así como de la consejera Rita Bell López y los consejeros Jorge Montaño y Arturo Castillo, quiénes fueron electos por la Cámara de Diputados a través del proceso de insaculación que establece la Constitución de los Estados Unidos Mexicanos, cuando no se logra un acuerdo de la Junta de Coordinación Política de dicha Cámara,
Como diputada federal fui participe de este proceso de selección inédito en la historia de México el cual, por cierto, se desarrolló de una manera ordenada y respetuosa con la presencia de 484 diputadas y diputados en el salón de plenos de dicho poder legislativo. Cabe destacar que durante la XLV Legislatura, ninguna sesión se había llevado a cabo con tanta sobriedad y respeto entre legisladores y legisladoras. Todas y todos estábamos conscientes que en nuestras manos estaba la legalidad y legitimidad de una selección, que, apegada a derecho, permitiera por fin, iniciar una nueva etapa en la Institución arbitro de los procesos electorales.
Las reglas de insaculación y de comportamiento fueron claramente definidas por la Junta de Coordinación Política, y todas y todos las respetamos al pie de la letra. Fue una selección abierta al pueblo, grabada a través del Canal del Congreso para que toda la ciudadanía la pudiera observar, y la pueda ver y volver a ver una y otra vez para disipar cualquier duda, incertidumbre o sospecha mal fundada.
Hoy queda claro que nadie quiere o ha querido destruir al INE, ha quedado claro también que la mayoría de las fuerzas políticas de este país somos capaces de salir adelante, aún en los momentos en los que pareciera difícil o imposible el logro de acuerdos, ha quedado claro, pues, que actuamos con responsabilidad para fortalecer la democracia y lograr hacer una realidad el artículo 39 de nuestra Carta Magna, que reconoce que la soberanía nacional reside esencial y originariamente en el pueblo y que por tanto su concreción depende de la posibilidad de mejorar nuestros procesos electorales con el apoyo de un arbitro honesto e imparcial, alejado de todo interés personal, partidista o de grupo cualquiera que éste sea.
Y enfatizo, que la mayoría de las fuerzas políticas, porque el Partido Acción Nacional no deja de dar palos de ciego en medio del abandono en el que se encuentra por parte de la mayoría de la población. Un día habla de que el INE no se toca, otro día aprueba las reglas de la insaculación, participa ordenadamente en la sesión, firma el acta de la sesión conducida por Santiago Creel y al otro día amanece en “modo impugnación”, desconociendo el proceso y a dos de los consejeros del INE a los que si pretenden “tocar”. Sin duda, en la vida y en la política cada quien decide como quiere pasar a la historia, y al parecer, en este proceso de tan alta importancia para la vida democrática de México, ese Partido ha decidido seguirse alejando del pueblo con su actuar errático e hipócrita.
Lo realmente importante este 3 de abril, ha sido la esperanza de iniciar la reconstrucción de una institución electoral que deje atrás los fraudes electorales del pasado ya sea a través de la manipulación de los sistemas de cómputo como sucedió en el 2006, o a través de la no actuación ante la evidente compra de votos como lo fue el proceso del 2012. Un INE en el que la imparcialidad y la honestidad sean costumbre, y en el que la burla y discriminación hacia la población indígena no tengan cabida. Un INE en el que la austeridad y la eliminación de privilegios de consejeros y personas servidoras públicas sean una realidad. Un INE que crea en la importancia de la democracia participativa y coadyuve a su implementación progresiva en nuestro país, y desde luego un INE que haga valer en todos los procesos electorales y en toda su conformación interna la paridad de género,
Hoy empezamos muy bien, la mayoría de las personas integrantes del Consejo General son mujeres, incluyendo a su presidenta, hago votos para que en su actuar tenga siempre presente la imperante necesidad de transformar ese Instituto por el bien del sistema democrático de nuestro país y honre en todo momento la invaluable oportunidad de ser la primera mujer presidenta del INE. Hoy sin duda, es tiempo de empezar a REPENSAR EL INE.
*Diputada federal por Morena