“Las sobrevivientes a un feminicidio en grado de tentativa tenemos mucho que contar y queremos hacerlo por escrito, convencidas de que escribir sana y los libros son una herramienta de cambio”, expresa Ana Valderrama, quien a nombre de la Colectiva Sobrevivientes de Feminicidio pide apoyo para concretar un sueño compartido.
En entrevista puntualiza que ya hay libros sobre el tema, pero la autoría recae en doctores, psicólogos y otros profesionales. “Que los siga habiendo, pero no sin nosotras”, indica.
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La activista, escritora y mediadora de lectura llama a cuestionar qué pasa y cómo viven las mujeres que sobrevivieron a un feminicidio en grado de tentativa cuando por alguna razón externa el agresor no logró su cometido.
¿Qué significa ser sobreviviente de un feminicidio?
“Ser sobreviviente significa para la gran mayoría salir a las calles con temor, algunas veces desalentadas, otras llenas de energía y unas más hastiadas por los procesos de denuncia, los cuales son desgastantes, de tortura institucional, con tratos inhumanos, degradantes y repetitivos”, manifiesta.
En víspera de la conmemoración del Día Internacional de la Mujer, sostiene que nadie cuenta a las sobrevivientes, nadie sabe cuántas mujeres sobreviven cada día.
“Nadie nos cuenta, no estamos en las carpetas de las fiscalías y si denunciamos tipifican el delito como violencia familiar, heridas graves o acoso”, expresa a nombre de la colectiva surgida en Xalapa pero con alcance nacional.
“Nos salimos del ‘ser víctimas’ porque le apostamos a la vida. Nos nombramos sobrevivientes, con lo que eso significa: tener miedo hasta de tu propia sombra”, añade la también fundadora de Aves y Moras, iniciativa de fomento a la lectura con perspectiva de género.
Con tres años de haberse constituido y al menos 35 integrantes de diferentes partes del país, la colectiva sueña con un libro digno, ilustrado y entrañable que llegue, principalmente, a las jóvenes.
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Testimonios, cuentos y poesía es lo que proponen para lograr un libro híbrido con un tiraje de cinco mil ejemplares que se presente en ferias del libro, espacios púbicos, centros culturales y entidades de gobierno.
También, ¿por qué no?, que se venda en varias librerías comerciales e independientes de México, dice.
Ana Valderrama menciona que todas las historias de las mujeres sobrevivientes cuentan, valen, merecen ser contadas para amplificar las voces y erradicar todas y todos juntos la violencia feminicida.
Actualmente está vigente una campaña de recaudación de fondos y se puede apoyar desde los 20 pesos. Las personas interesadas es apoyar pueden saber cómo hacerlo en en https://hipgive.org/es/campaign/gomujeres2023/las_sobrevivientes_contamos_y_contamos_contigo_para_contarlo.
Más allá de la colectiva, la feminista y mediadora de lectura sostiene que escribir da estructura, sostén y sanación: “Si traes dolores en la vida, el escribir es como exorcizar los demonios, hacerlos chiquitos, pasar sobre ellos y dejarlos donde no te hagan daño”.
